viernes, 30 de octubre de 2009

capt 02

Lucio Harik vivia en una estrecha y maltecha casa en medio de dos nuevos edificios. alguna vez fué la construcción principal del barrio, y aunque nunca fué muy lujosa, supo ser acogedora. era una cuadrada amplia, con alusiones coloniales, de techo de 4 aguas y buen verano. una buena matriz para pasar el rato hasta la noche siguiente. un recanto olvidado que aún no era mal visto.

en el edificio de al lado, las amplias ventanas delataban un lujo forzado y previsible. microondas de varios botones y un juego de puertas blancas eran el templo y dominio de algun extraño. luego, en el segundo piso, otra ventana con iguales pretensiones denunciaba el rito: la repetición interminable del mismo fotorama como pretensión de belleza.

el edificio, casi sin quererlo, se deslizaba al lado de la vieja casa como un depravado. la casa se extendia hasta el medio de la cuadra, y el edificio, en la esquina, la seguía largo y paciente , en la procura de un minuto de contacto. Lucio podia ver cada ventana, y 6 pisos arriba, podia ser visto. como construimos una sociedad de abuso mutuo por medio de omisiones.

Al fondo, donde el garage se desinteresaba de la vecina, la casa era un desperdicio. una pequeña montaña de botellas plásticas, acumulada por no se qué impetu moentario governava un patio olvidado, donde crecian los maracujás y zapallos. Un kilimanjaro PET crecía y descrecía, vendía y maduraba, y con la marea de botellas podiamos medir la esperanza de nuestra cena.



sábado, 24 de octubre de 2009

capt 01

Lucio tenia 25 años cuando el diablo se le presentó en sueños. tenia el sueño pesado, Lucio, y no recordaba lo vivido después de abierto el sueño. estaba en una biblioteca, y era la biblioteca de sus ancestros. en la pared maderada, generaciones de hariks contemplaron al san jorge arcaico que tenía que ser su abuelo. en los estantes, libros escritos por los soñadores, en tal espesor y tantas razas, que los habia para todas las noches de insomnia. y era imsomnia lo que los Hakim conjuraban en su biblioteca. una otra forma de seguir despiertos, a traves de los siglos, en el asma de la biblioteca. y necesitaba Lucio del diablo para cosa alguna? hace 50 años, varios miles de infelices hubieran vendido su alma por dólares, una bailarina, un carro, o un rolex de varios kilates. pero el diablo, que habia hecho tanto por tantos hombres, debía ser victima de su propio sucesso, pues no habria hoy como pedirle algo que no hubiera ya dado . en el mundo de neón y asbesto, habian mejores patrones que el viejo demonio. Lucio, entonces, no seria un inoportuno pidiendo boberas a cambio de un cuerpo más en el infierno, seria un interlocutor oculto: el diablo estaba con dudas.

- disculpe la pregunta, soy nuevo en este sueño: donde están los hariks?

-los hariks se han ido. peste, alcohol, y la vocación por el sacerdocio acabaron con la desendéncia. estamos en los ultimos dias de la raza. alguna vez aparece aqui un otro, que vive en una frontera. pero generalmente estoy aqui en solitario, llorando la falta de tu familia.

-le debemos algo? nos debe algo?

-algo que reúne las dos cosas, más o menos.